Es mi condición. Mi condición depresiva. Porque a decir verdad he pasado por momentos más difíciles que estos y los he superado. Eso, aunque patético, debería ser mi consuelo.
Pero ando sumida en esta tristeza que me debilita la mente y el cuerpo y limita y capacidad de accionar. De accionar con esa fuerza y valentía que siempre he tenido aún en medio de otras tristezas. Ahora es como que estoy un poco debil, de pensamiento, de sentimiento, de acción.
No hay comentarios:
Publicar un comentario